En 124 años de
historia, los Juegos Olímpicos jamás habían cambiado su fecha, sí, habían
cambiado de hogar, pero ¿cambiar el ciclo olímpico? ¿qué consecuencias conlleva
dicha determinación?
En un suceso sin
precedentes y como consecuencia de la emergencia sanitaria derivada de la
pandemia global por el virus SARS-CoV2, los Juegos Olímpicos Tokio 2020 fueron
reprogramados para julio y agosto de 2021.
Anteriormente, habían
sido cancelados por completo debido a las dos guerras mundiales, siendo los
JJOO de 1916, 1940 y 1944 los que no vieron encenderse el pebetero, o fueron saboteados
por temas políticos y sociales durante la Guerra Fría, con las ediciones de
Moscú 1980 y Los Ángeles 1984 con visibles afectaciones.
El
reto para el deporte.
Esta decisión ha hecho
reestructurar planificaciones con base en el nuevo calendario de competencias,
y ha buscado nuevas formas de entrenamiento ante esta pandemia, obligando a una
evolución digital derivada de la imposibilidad de realizar deporte de forma
presencial.
Las reuniones virtuales
se han convertido en la herramienta más usada en estos momentos para dar
seguimiento tanto a los deportes individuales como de conjunto, con el fin de
darle continuidad al desarrollo físico y mental de los deportistas.
Queda pendiente conocer
el impacto de la reprogramación del ciclo olímpico en otras competencias internacionales
tales como los Juegos Panamericanos, Europeos, Asiáticos, así como competencias
mundiales de las diferentes disciplinas deportivas e, incluso, la propia Copa
de Mundo de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
El
impacto económico.
El retraso al 2021 conlleva
consecuencias severas en el sector económico, estimando una inversión adicional
de ?2,500 millones de euros adicionales a los ?9,000 millones ya invertidos
anteriormente.
Según reporta el Comité
Olímpico Internacional (COI) que el aplazamiento tuvo un tiempo de cuatro
semanas para valorar los aumentos presupuestales, así como para considerar la
posibilidad de realizarlo. Este aumento presupuestal se desprende de la
extensión de un año del operativo logístico que conlleva mantener las
instalaciones, el pago de personal y de arrendamientos temporales para la
competencia por un año más en espera del evento, teniendo en cuenta que se
esperaba la finalización de dicho operativo en septiembre de 2020, posterior a la
clausura.
La más importante
contienda deportiva estará iniciando el 21 de julio con el futbol y béisbol,
siendo el 23 de julio la inauguración y cerrando el 8 de agosto con la clausura
en el recién reconstruido Estadio Nacional.
Autor: Prof. Claudio Torres García | Coordinador de Deportes.
Colaboración: Lic. Nithe
Muñoz Riveroll.
Fotografía: Dolores
Hernández Monzón, estudiante de la Escuela de Mercadotecnia Internacional y
atleta en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Teléfonos: 5594-1290 |
5603-5049 | ext. 201 y 204
Correo electrónico: deportes@upedregal.edu.mx
Da clic aquí y síguenos
en Facebook
| Instagram | Twitter
¿Conoces nuestra página
web? Da clic aquí.
Los
puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor y no
necesariamente representan la posición oficial de los Colegio La Salle de
seglares, la Preparatoria La Salle del Pedregal o la Universidad Del Pedregal.